Los Japoneses son una raza en peligro de extinción

Disclaimer: El siguiente post fue hecho con toda la intención de causar molestia, ser ofensivo y agredir a terceras personas. Si usted, al leer esto, se siente ofendido, agredido, insultado, injuriado, ****ado, #%#$%ado y/o demás, este humilde blogger sentirá que habrá cumplido su objetivo.

“Tres millones de solteros viven con sus padres y la mayoría de las mujeres prefiere esperar a después de los 40 para tener hijos. A este ritmo, la población se reduciría a la mitad para fin de siglo. […] Las nuevas estadísticas publicadas la semana pasada demuestran que el año pasado la tasa de natalidad llegó a su nivel más bajo. Si la tendencia persiste, después de llegar a 127,7 millones el año próximo, la población seguirá en caída: a 109 millones en 2050 y a 64 millones para fin de siglo, según el Instituto Nacional de Investigación sobre Población y Seguridad Social de Tokio.” (El Clarín, 10/Jun/05)

“La Organización de Naciones Unidas (ONU) estimó este martes que […] Japón necesitarían un flujo anual de 10 millones de inmigrantes hasta 2050, para atenuar el impacto económico del envejecimiento de su población, según el informe "Desarrollo en un mundo envejeciendo" (La Jornada, 19/Jun/2007).

Si hacemos algo de historia, podremos ver que Japón, en menos de 150 años pasó de ser una asquerosa isla perdida a la mitad del Pacífico llena de enanos ojos rasgados que solo comían arroz y algas a uno de los principales motores económico y tecnológico que esta a punto de desvielarse a causa de que sigue lleno de enanos ojos rasgados que ahora, en vez solo comer arroz y algas, ahora se alimentan de azucares y harinas refinadas condimentados con glutamato monosódico (personalmente prefiero morir de cáncer por fumar) y coloreados con amarillo #14 y azul #90, a.k.a. Maruchan.

¿Y a que chingados viene todo eso? Que es muy posible que dentro de 200 años aproximadamente, independientemente que nos llegue o no el Apocalipsis, ya no existirán japoneses.

Y eso ¿qué? No lo se… solo me parece algo cagado.

¿Por qué? Ahí esconde viene el chiste…

El hito de la sociedad capitalista, hiperinformada, globalizada, tecnificada, enajenada, consumista y ligeramente (y solo ligeramente) intoxicada a la que todo país aspira a tener no se dio de la noche a la mañana. El primer escalón de la escalera que lleva a ninguna parte podría localizarse en la vieja civilización romana, pero eso esta muy lejos de mi punto, a si que le picaremos al botón “>>” de nuestro controlo remoto durante un rato hasta llegar a Inglaterra del siglo XVI.

¿Qué sucedió ahí? La revolución industrial. Y eso ¿qué nos importa? Pues es sencillo: mucha de gente que se vivió toda su vida rodeada de cabras, vacas, pollos, patos y puercos emigraron a los centros industriales para estar rodeados de smog, concreto, bancos y vendedores de tiempos compartidos; pasaron de ser campesinos pobres a proletarios pobres. ¿Y como era posible que gente que solo sabia sembrar, cosechar, medio hablar y reproducirse como solitarias en verano tercermundista se convirtieran en maquinistas, operarios, jefes sindicales y porros universitarios? Pues los dueños de las fábricas obligaron a los gobiernos a utilizar el dinero que gastaban en mansiones, viajes y joyería estupidamente cara en educación publica gratuita.

Así pasaron dos o tres generaciones hasta los industriales se dieron cuenta que era mas factible llevar sus fabricas a China, Taiwán, Bolivia, Colombia o algún olvidado por Diosito Bimbo (MR), lo cual llevó a lo que Alvin Toffler llamó “La Tercer Ola”: la sociedad de la información. En ella, la información de todas sus formas (llámese investigación científica, militar, publicidad, telecomunicaciones y/o fotos de Britney Spear o Paris Hilton enseñando las tetas) se volvieron la nueva piedra angular de la economía. Los proletarios dejaron de serlo por la sencilla razón de que algún chino estaba dispuesto a hacer el mismo trabajo en condiciones aun más miserables y a fracciones de su salario. Esta riqueza llegaba a los industriales, los cuales estaban dispuestos a gastarla en sus antiguos proletarios a cambio de que se desperdiciaran aun más tiempo de sus vidas en aquellos antros de parranda y perdición a los que llamamos universidades. Así, después de otras dos o tres generaciones, ya no teníamos proletarios, ahora tenemos clase-mierderos.

Seguramente preguntaran ¿y eso que tiene que ver con Japón y que ya no habrá Taka-Takas dentro de 200 años independientemente que nos llegue el Apocalipsis o no? Pues de que este proceso de 300 años lo vivieron en 50; esto quiere decir que cuando al esposo de Sakura (que es el equivalente a Maria o Guadalupe para región 4) lo sacaron de su plantación de arroz y lo llevaron a perder tres dedos en la maquiladora mas cercana a su parcela, su hijo fue capas de estudiar en una universidad. A este punto todo mundo dirá “pero goooeeeey!!! Tu sabes, eso es chido, no?”, pero, como todo en esta realidad en que vivimos, donde la estadística solo sirve para “en el peor de los casos”, no fue así.

Todos sabemos que la Japón es la máxima meca de la mercadotecnia, pero ¿por qué? No es porque sean mejores publicistas, diseñadores gráficos o creativos, (como cierto amigo vive engañado) solo es porque es donde mas pega. ¿Una razón? ¿Quien necesita razones cuando tienes la imagen de un changuito fumador? ----->

Si la analogía no les resulta clara, aquí va la explicación: la publicidad vende al mantener al obtener y mantener atención del espectador, la forma más común y fácil de hacerlo es ofreciendo al espectador estímulos placenteros, ¿nunca te has preguntado que hace una modelo austriaca anunciando pasta de dientes, refrescos, tortillas, computadoras y chicles? Japón, al dar aquel vertiginoso paso a la sociedad de consumo, no poseía los mecanismos necesarios para hacer frente a esta, razón por la cual solo se necesita una chica que ni tiene que ser realmente bonita, con una voz suficientemente molesta para obligarte a voltear a ver, música chillante y gente vestida con colores vistosos para tener a todo Japón celebrando navidad, pascua, año nuevo occidental, reyes magos, el día de la independencia y hasta niños héroes.

Ahora piensen por un segundo ¿qué lógica tiene estudiar una licenciatura con maestría si no piensas casarte y vas a vivir tus padres el resto de tu vida? Yo solo lo puedo llamar de una forma: sobredosis de Love Hina y Densha Otoko (el equivalente oriental de exceso de Mandy Moore y Drew Barrymore).

Pero, pero… ¿Por qué? Porque son estupidamente cursis.

Pero ¡si son bonitas! De hecho, demasiado, y por eso te pueden hacer perder la percepción de la realidad. Y si a eso agregamos el poder de los medios japoneses, no es muy viajado que un
homosexual con el vicio de vestirse de mujer o unas mocosas de secundaria sean contempladas como símbolos sexuales.

Resumen: si en tu país esto -->

es sexy, definitivamente tienes pedos, y de los feos…

Si hacemos un retroceso histórico podremos observar que casi la totalidad de los matrimonios se llevaron acabo por necesidad y las cursis historias de amor eterno solo existen en las retorcidas mentes de algún cincuentón amargado como nos muestras Jack Nicholson en “Mejor… Imposible”. El proceso es sencillo: cuando se tiene nivel de vida, uno tiene oportunidad de escoger y cuando se tiene preparación académica se te enseña a pensar las cosas antes de hacerlas. Resultado: tienes opciones y piensas demasiado, que a lo único que te puede llevar es a ser un treintañero comiendo palomitas acarameladas en un sofá mientras vez el ultimo paño de la grimas del verano.

Pero no te preocupes, en la larga cadena devolutiva humana hay eslabones aun mas tristes...

Gloria Trevi Strikes Back!!!

Esto no quiere decir que no existiera gente que se casara y tuviera hijos por amor, sino que ahora nos complicamos mucho la vida. Para nuestros abuelos y padres era mas sencillo: te casas por que 1) no tienes dinero 2) te corrieron de la casa 3) quieres tener hijos 4) porque puedes y punto. El estudiar y tener trabajo era secundario, ya que en esencia uno quería trabajo para mantener a su esposa e hijos. ¿Qué sucede ahora? Pues que gracias a ese gran chiste que perdió la gracia de tanto repetirse, llamada feminismo, además de la publicidad inyectada para obsesionar a la gente a tener papeles membretados con su nombre para enmarcarlos y colgarlos en la pared (a los cuales llamamos títulos profesionales) han hecho que nos olvidemos de lo primero y nos concentramos en lo segundo. ¿Por qué? Porque a las empresas no les gustan las gentes casadas y gastan carretadas de dinero cada año y están dispuestos a pagarte si permaneces soltero. ¿Por qué? Porque así tu única preocupación es tu trabajo, porque así puedes pasar todo el día en la oficina, porque así no tienen dar incapacitaciones por embarazo, pagar seguros médicos a hijos reempleados, becas escolares y demás prestaciones. Resultado: pues que ahora la gente llega a los treinta años preguntándose qué ha hecho de su vida e empieza a buscar con quien casarse, pero como esta acostumbrada a pensar demasiado las cosas, termina no haciendo nada.

Por otro lado, ¿saben que tan pesada es la legislación sobre drogas? No voy a salir con la idiotez de que las drogas son buenas, malas, destruyen (solo hay que ver el programa de Flav), y demás faroleces. De todos modos, a mi ¿quéme importa? todavía no me patrocina Vive Sin Drogas. Pero lo que si no se puede negar, es que muchos de los movimientos culturales que remodelaron el mundo en los últimos 300 años fueron hechos por consumidores de drogas (Lewis Carol, Nikola Tesla, Kurt Cobain, The Beatles y Andi Warhol son unos nombres rapidos). Pero, olviden eso, ¿una asquerosa cajetilla de Marlboro a 3 euros?

Para resumir, dejaré que alguien más conteste por mí:

“El rendimiento de un hombre felizmente casado es mediocre. Nada que ver con el de un workaholic en sus veinte medios, soltero, sin ningún compromiso que sus obsesiones y fetichismos personales, amargado o a punto de amargarse, lleno de energía. Ése es el tipo de soldado que la corporación necesita. [..] Créanme: ese sujeto estupido, trilingüe, hiperinformado, emprendedor, altivo, vivaz y enérgico existe. Le llamamos recién graduado.”

A eso solo hay que agregarle que sus hombres se masturban pensando en mocosas de secundaria y sus mujeres en homosexuales.

Si un japonés lee esto, aquí les dejo mi mensaje de buen samaritano: coger y drogarse es muy fácil y sencillo. Just Do It.

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Normalmente dejo una canción de mi preferencia al final de cada post, pero en esta vez dejaré algo mas ad hoc al post: un videito muy acertadamente titulado “Lucky Star Intro makes me wanna stad myself in the face”.

Update #1: Si el articulo tiene cierta incongruencia y se sale del tema central, no solo es culpa del TDA. Como llegaron las vacaciones, pues me tuve que mover a Ciudad del Carmen, donde viven mis papás, y muy aparte de que el calor es estupidisante, me han pasado, desde que he llegado, lo siguiente: síndrome de abstinencia del tabaco, erupciones en labios y cuello y, como cereza en el pastel, una infección intestinal con vomitos, diarrea, fiebre y nauseas. En síntesis, me estoy pudriendo. Y como si no fuera suficiente, al teclado demi hermana no le funciona bien la barra espaciadora >_<*

Update #2: Mi amigo el charles me hizo la observación de que el post parece copia del estilo del autor, y si en cierta medida es cierto, tengo dos pruebas inufutables de que no fue intencional: 1) el autor agrede grupos de personas y 2) el autor no tienen faltas de ortografía.

Update #3: “Desaprender” es una palabra que se puso de moda entre los pedagogos de hace 30 años. Básicamente consiste en olvidar las convenciones paradigmáticas autoimpuestas para estar abiertos a nuevas posibilidades. ¿Entendieron algo? Solo tienen que olvidar esto, y de paso olviden el post por completo porque mi amigo el Charles me acaba de dar una razón más valida y sencilla de porque los japoneses ya no pueden tener hijos: